EL GOBIERNO ANUNCIO UN AUMENTO EN EL PRESUPUESTO HOSPITALARIO

HOSPITAL GARRAHAN.

El Gobierno nacional anunció un aumento en el presupuesto destinado a hospitales y centros de salud de alta complejidad, con especial foco en el sector pediátrico, pese a que la Ley N° 27.796 de Emergencia Pediátrica continúa suspendida en su implementación. La medida fue oficializada por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, mediante la Decisión Administrativa 29/2025, publicada en el Boletín Oficial. Aunque la ley aún no fue ejecutada, el Ejecutivo subrayó su compromiso con la priorización de la atención sanitaria y el fortalecimiento del sistema público de salud.

El documento establece que se modificará el Presupuesto General de la Administración Nacional para 2025, afectando únicamente al área de salud, mientras que el resto de los sectores mantendrán los mismos fondos asignados desde 2023. Según precisó Francos, el refuerzo presupuestario permitirá cubrir gastos operativos, salarios y recursos en hospitales clave como el Hospital de Pediatría Garrahan, el Hospital El Cruce - Dr. Néstor Kirchner, el Hospital de Alta Complejidad de El Calafate, el Hospital Cuenca Alta Néstor Kirchner, el Hospital Dr. René Favaloro y el Hospital Presidente Néstor Kirchner, entre otros.

La ampliación también abarcará organismos descentralizados como el Hospital de Salud Mental y Adicciones Laura Bonaparte, el Hospital Nacional Baldomero Sommer, el Hospital Alejandro A. Posadas, el Hospital Dr. Ramón Carrillo y el Instituto Nacional de Rehabilitación Psicofísica del Sur Dr. Juan Otimio Tesone. Esta reasignación busca sostener las necesidades que originalmente contemplaba la Ley de Emergencia Pediátrica, la cual disponía la recomposición salarial del personal asistencial y no asistencial y la actualización de ingresos de los residentes médicos.

El Poder Ejecutivo resolvió mantener la suspensión de la ley, argumentando que la norma no definía una fuente de financiamiento concreta y que su costo estimado, de $196.270 millones, superaba ampliamente la capacidad presupuestaria del Ministerio de Salud, actualmente con un déficit de $102.400 millones. Según el análisis oficial, reasignar recursos de tal magnitud implicaría comprometer hasta el 60% del presupuesto destinado a programas de prevención como el VIH-Sida y el 30% de los subsidios a medicamentos y tecnología sanitaria. Por ello, la norma seguirá en pausa “hasta que el Congreso determine su financiamiento y lo incorpore al presupuesto nacional”.

Aun así, Francos destacó que el Ejecutivo “tiene la voluntad de atender, dentro de las disponibilidades presupuestarias actuales, las necesidades tenidas en cuenta por el Congreso al sancionar la referida ley”. Además, recordó que el sistema de salud público nacional permanece en estado de emergencia por un año, y que la ampliación del presupuesto se concretará mediante una reducción proporcional de fondos asignados al Tesoro Nacional. De esta manera, el Gobierno busca reordenar las partidas vigentes sin requerir una nueva votación legislativa, garantizando la continuidad de la atención médica en los principales hospitales del país.